Esto no es un cuento fue real, y le recomiendo alas señoras mayores que lo tomen bien en cuenta, seguramente les ha de ser util.

Necesito confesarme con alguien mas que con mi amiga del alma.
Gracias a ella llegue a ser feliz como nunca lo había sido, es claro ignoraba lo que había mas alla de la vida conyugal que la sociedad llama normal.
Durante mis primeros 43 años tuve solo un amor, un hombre al que conoci siendo niña y con quien crecimos juntos en todo sentido, incluso en el sexo, era electrotecnico y trabajaba en la compañía de electricidad, yo maestra pero de poco ejercicio, mas bien ama de casa.
No tuvimos hijos, cuando los buscamos que fueron muchas las veces, los abortaba en forma natural como máximo a los dos meses, a medida que crecían nuestros complejos, también lo hacia la desazon de no poder ser madre.
Hasta que un medico me prohibió coger sin condon pues ya peligraba mi salud.
Desde ese dia nuestros polvos se fueron dando con menos frecuencia y además con menos interés, hasta que ya a los 40 raramente cogíamos.
Mi organismo no me lo pedia y su próstata tampoco colaboraba.
Luego su accidente reparando un circuito en corto, me lo llevó. Quede sola, sin familia con solo una amiga intima que tenia un amante muy joven, un chico con quien cogía desde sus inicios y ya frizaba los 19 años, siempre ponderaba lo bien que lo hacia y cuanto gozaba.
Yo no podía comprender como a su edad todavia se mojaba como una pendeja y cogía cuantas veces el chico quería, y según ella lo hacia varias veces por dia pues el niño no tenia horario solo tenia un surtidor de carne que le daba leche a raudales.
En cambio yo reseca y sin ganas, solo que me incitaba a hacerme alguna paja con lo que ella me contaba de sus gloriosas cogidas.
Siempre me insistia: búscate un chico, son los mejores, los haces a tu gusto y te sirven seguido, tanto a que a veces pides clemencia.
Hasta, ella tan buena, me comento si quería lo prepraba al suyo para que en alguna ocasión hiciésemos alguna fiestita asi me lo prestaba y probaría lo que me estaba perdiendo.
No, por favor, le conteste horrorizada.
Me miró, y seguramente pensó, : es una desagradecida.
Si, desagradecida y torpe, perdóname Tina, recien ahora te comprendo.
Todo ocurrió sin pensarlo, como por magia, pero ocurrió.
Les cuento:
Yo acostumbraba algunas noche pedir algún plato para cenar al delivery de la otra cuadra.
Siempre lo traia un chico con su motito, ni cuenta me daba de quien era, hasta que un dia mi amiga que había venido a casa lo ve y me dice: boluda fijate que precioso ejemplar de pendejo te trae el pedido.
Días después, en otro pedido me fijo en el, delgado, alto, rubiecito de pelo corto, muy blanquito, sonriente, unos ojazos claros de mirada picara, unos labios carnosos, y no mas de 17 añitos.
Esa noche me hice los ratones y al acostarme me note mojadita, muy raro en mi, y jugando jugando me masturbé soñando que me lo estaba cogiendo.
Cuando le cuento a ella, se rió de mi y me dijo espéralo en pelotas.
Que locura nunca haría semejante cosa.
Pero quizás de vestimenta un poco mas insinuante podría ser.
Lo hago pero el chico nada, parecía que ni me registrase, claro soy una clienta mas y para colmo vieja.
Deberé en serio recibirlo en bolas?.
No, no estaba en mi hacer eso.
Pero por fin un milagro ocurrió.
Una noche helada con fuerte lluvia pido comida y llega él, hecho sopa y tiritando.
Pasa, no te quedes en la calle, estas helado, te vas a resfriar.
Si señora, no fui precavido y me sorprendió un chaparron muy fuerte.
No se de donde saque el coraje de decirle, ve al baño y abre el agua caliente llena la bañera y ponte en ella, te recuperaras, a la ropa me la dejas al pie de la puerta y te la seco.
Hasta allí solo me movio el altruismo, no el deseo, pero cuando recojo la ropa mojada y siento el sonido del agua correr dentro del baño, se me despertó el deseo de verlo desnudo.
No, no es correcto.
Y tomando la ropa la exprimi y la puse dentro del secarropas.
En 15 minutos quedo bien seca, pero pensé, no!!, no se la daré, le llevaré una bata mia y veremos que pasa de mientras lo veo desnudito, como la tendrá?, será chica, claro es un niño, me gustará, seguramente a que mujer no le gusta una pija cualquiera sea su forma o tamaño.
Voy y golpeo la puerta, hijo te traigo una bata para que te pongas mientras se seca tu ropa, si ya estas repuesto del frio ven a comer algo y tomar algo caliente.
Abro y extiendo mi mano, el no se muestra y toma la bata agradeciendo.
Yo tenia puesta una blusa blanca, sin corpiño y una pollera a la rodilla acampanada, con bombachas por supuesto.
Pensé, debía haberme puesto una calza, se hubiese notado mas mi culo.
Por la parte superior de la blusa se notaba mi zanja y debajo algo se vislumbraban mis pezones.
Medias grises caladitas y zapatos de medio taco.
Sin pintura pero perfumadita.
Estaba realmente nerviosa, como una nena.
Sale y viene a la cocina, le preparo la mesa y ambos nos sentamos a comer, ve su cartera sus documentos y su celular, lo toma y llama al trabajo diciendo que no iria porque se va a cambiar la ropa toda mojada.
Se sienta cuidadosamente para que no se abra la bata que le quedaba ajustada y contesta mis preguntas, su nombre, yo le doy el mio. Conversamos sobre lo que hace, parece que hace ese trabajo para costearse sus estudios, bueno trivialidades sin importancia, hasta que le pregunto si tiene novia, me dice que no.
Pregunta él y le digo viuda y sola.
Recien entonces noto su insistente mirada a mis pechos, yo bien calculadora hago que un raviol se caiga de tenedor y me manche la blusa, O que vergüenza, perdóname, mojo la servilleta con agua y froto la mancha, la tela se transparenta y muestra parte de un pezón en la mancha que en cambio de quitarla la extiendo.
Le digo me voy a cambiar, me dice no por favor, asi esta mas atractiva.
Hijo, que me dices, tu en bata y yo mostrando una teta, esto es peligroso.
Se levanta y viene hacia mi de entre la bata asoma una resplandeciente cabecita roja, la tiene parada, me toma de los hombros, se la siento sobre mi espalda, levanto la cabeza y siento sus labios sobre los mios.
Respondo su beso con mi lengua y al separarnos, le digo: que estamos haciendo?
Me calla con otro beso mas profundo poniéndose a mi costado y su pija apuntando a mi boca, ni lo pensé, me la comí, que manjar.
No podía precisar cuan larga era pero gordita estaba, lambo los bordes de su cabeza la tenia fuera de su funda, el frenillo lo tenia sanito, mi lengua era una papila dactilar que la recorría para conocerla, pensaba pronto la tendré dentro mio, que placer.
Con una mano lo pajeo y con la otra sobo sus huevitos, chicos, casi sin bello, suaves como todo el.
La quiere sacar, no lo dejo, me dice cuidado, ni lo escucho aguardando su leche en mi boca, y asi fue, divina, rica, calentita, bastante, pensé la próxima adentro mi concha amor mio.
Con mi edad ya no era necesario el odiado condon, lo gozaré como la puta que deseo ser.
Le quito la bata, mientras me trago su licor, le tomo la mano y vamos al dormitorio, me desviste, se prende a mis tetas con tanto cariño y sapiencia me vuelve loquita, cuando ya me viene me saca la pollera y aparta la bombacha ya mojadita para lamerme la lengüeta, este pendejo sabe mas de lo que una creía, que bien lo hace y ahora yo le digo cuidado!!!, y me le vengo en su boca, no se aparta sigue, me mata , me retuerzo, cuanto hacia no había tenido un orgasmo igual , duró bastante y el seguía, hasta que le pido por favor me deje un instante.
Me baja las bombachas, su pija ya estaba bien dura, la vi en todo su esplendor me abro de piernas las levanto y por fin siento como resbala dentro mio, tan ansiado tesoro, y sus huevitos se apoyan en mi, la tenia totalmente adentro mio, no era tan chica, me llenaba y enloquecía, lo atenazo con mis piernas, no mucho para que pueda moverla pero que no se vaya a salir.
Asi, no mas de dos minutos y siento sus bufidos y su leche, lamentablemente no lo acompañé con mi orgasmo pero milagrosamente no la saco, la dejó adentro, se bajaba, el me besaba las tetas las chupaba, yo lo acariciaba en el culo y la espalda cuando siento, lo que nunca, la pija iba recobrándose dentro mio, una sensación, que nunca había sentido, algo glorioso, ya estaba para seguir era cierto aquello de “dos sin sacar”.
Ahora si siguió por un buen rato, y la que no aguantó fui yo, en mis estertores y grito siento como eyacula dentro mio, lo que prolongó hasta el infinito mi goce.
Había cumplido mi sueño, pero no deseaba despertar tan rápido, el chico ya se había echado tres por allí habría mas.
Me le acurruque sobre su pecho y lo fui besando, despacito hasta llegar a la pija, estaba dormidita, totalmente encapsulada, ahora los huevos parecian mas grandes, era que colgaban mas, me los meto en la boca mientras masajeo al choricito, y luego me lo como despacito, siento su mano acariciar mi cabeza, y por suerte va asomando su cabecita roja, no la perdono me ocupo de ella, siento que quiere girarse, pienso querra un 69, que bueno.
Y asi fue, un bello 69 donde el guacho me acabó por cuarta vez y yo segui pajeandome hasta lograr una acabada suave, le digo no tienes hambre?. Si mucha y se prende a mis tetas, lo que acelero mi gozo.
Recalenté la comida, cenamos en bolas, no tenia idea de cuanto tiempo pasó desde que lo hice por ultima vez.
Luego le di su ropa y se fue, me dijo mañana si quieres pide cena pero bien tarde asi la seguimos, que te parece?, seguro a que hora, pídela a las 11 y media, seras de los últimos.
Saben le regalé un traje para agua que era de mi esposo, no vaya a venir un dia de lluvia y tengamos que perder un tiempo precioso para quitarle el frio.
Y asi ya hace un tiempo estoy gozando de mi nuevo macho, he rejuvencido, cojo como una pendeja, acabo como una bestia y gozo como ninguna.
Tina amor mio, cuanta razón tenias al recomendarme un pendejo, lo amo me ama, bueno no lo sé bien, pero no importa, no tiene horario a veces pasa solo para culearme, si culearme, me hace también el orto, yo que hasta conocerlo lo tenia virgen.
Que mas puedo pedir.